sábado, 10 de enero de 2009

las almaduras de Dios

LA ARMADURA DE DIOS
Por: Gustavo M.F.

Una de las frases que más han impactado en vida, es la que escuche de un Pastor evangélico hace varios años quien decía que “la felicidad de un cristiano, no depende de las circunstancias sino de una continua y completa comunión con Dios”, en realidad esta frase aduce a una verdad absoluta, pues la paz interior solo se obtiene como resultado de esa comunión con Dios sin importar los problemas del mundo exterior; sin embargo no es muy frecuente que los Cristianos que saben de la importancia de mantener una comunión cerrada con Dios lo hagan así y esto se debe en gran manera a que se vive en pecado, aunque muchas veces no nos damos cuenta de ello.

Uno de los engaños favoritos de Satanás es hacernos creer que el pecado no trae mayores consecuencias, pues adicionalmente tenemos un Dios rico en paciencia y misericordia. Es un error pensar que seremos libres de las consecuencias del pecado, la Biblia dice en Gálatas 6:7-8 “No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.” no obstante esto cuando se vive en pecado, se mal entiende la misericordia de Dios suponiendo que el Señor aprueba nuestra vida pecaminosa ya que pese a nuestra actitud, seguimos viendo la provisión de Dios en nuestra vida con el trabajo, el alimento, la salud, etc..

Hay quienes de forma por demás flagrante desobedecen a Dios: no se congregan, no meditan las Escrituras, no aman a sus cónyuges, no obedecen a sus padres, practican el adulterio, la mentira, no son mayordomos de los bienes que Dios les da, buscan el yugo desigual, no confiesan a Cristo y no tienen a Dios en el primer lugar de sus vidas, y pese a esto, suponen que están bien delante de Dios.

El Espíritu Santo a través del escritor de la carta a los Hebreos, dice que Dios disciplina a todo aquel que recibe por hijo (Hebreos 12:6), por lo tanto muchas veces al notar que esa disciplina no llega, suponemos que estamos bien, que Dios acepta y aprueba eso que hacemos y que sabemos perfectamente que es pecado.

Si bien es cierto que la tentación puede provenir de Satanás, también lo es que nosotros mismos podemos propiciarla, Santiago escribe “14...cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia ....
Mas...www.mx.geocities.com/gustavo_cu/laarmadura

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...